Cualquier país europeo que solicite convertirse en miembro de pleno derecho de la Unión Europea debe respetar los principios de libertad, democracia y Estado de Derecho, así como proteger y preservar los derechos humanos y las libertades fundamentales. Las negociaciones con los países socios que no sean estos valores europeos deben congelarse hasta que demuestren un compromiso real y mensurable con el respeto y la adhesión a nuestras normas y principios.

Además, en los acuerdos comerciales con terceros países, la UE debe dar prioridad al respeto de los derechos humanos en esos países como requisito mínimo.

Estudiar en el extranjero es popular entre los jóvenes. Pero a menudo ocurre que, para quienes estudian en el extranjero, el compromiso con las políticas, los gobiernos y la UE es difícil debido, por ejemplo, a la barrera lingüística. La participación de los jóvenes en un país de la UE distinto de su país de origen debe ser más accesible, empezando por una lengua común que permita una mejor participación.

Los gobiernos y otros organismos públicos están aprovechando las posibilidades de vigilancia masiva que ofrece Internet. A veces, en nombre de una mejor seguridad pública, los gobiernos vulneran los datos personales y violan el derecho de los ciudadanos a la intimidad. Ha llegado el momento de que esta situación cambie.

Los gobiernos no deberían tener acceso a nuestros datos personales con el pretexto de proteger a los menores o luchar contra el terrorismo. En efecto, en la mayoría de los casos, las principales víctimas de violaciones de la seguridad de los datos personales son personas comunes, periodistas y activistas, ya que son «peligrosas».

Los jóvenes deben estar capacitados para participar eficazmente en el proceso democrático de toma de decisiones y deben desarrollarse herramientas que les informen de lo que se ha hecho con sus propuestas.

Una clara frustración que sustenta las ideas de los jóvenes se refiere a la sensación de que su voz no se escucha a menudo. En lugar de una «política de la juventud» (la juventud como tema independiente), los encuestados piden una «política de la juventud», es decir, una política que parte de la idea de que los jóvenes son el futuro de Europa y de que todas las medidas y políticas adoptadas por el Parlamento Europeo afectarán más a los jóvenes. Los grandes retos a los que nos enfrentamos como humanidad, como la crisis climática, la distribución desigual de los recursos, y más aún, son problemas a los que nos enfrentamos los jóvenes. 

Hemos demostrado que estamos interesados en configurar Europa juntos y que queremos y somos capaces de participar activamente. El momento en que los políticos solo se ponen en contacto con los jóvenes a través de reuniones simbólicas y fotos ha terminado. Los jóvenes quieren ocupar un lugar en la mesa de elaboración de políticas.

Los políticos deben rendir cuentas ante sus ciudadanos. Esta es la razón por la que los ciudadanos de la UE deben tener derecho a acortar directamente el mandato o incluso a eliminar a los políticos que no son competentes en su papel y a sustituirlos por mejores alternativas.

Alemania ha tipificado como delito a los movimientos nazis y a la promoción de símbolos nazis. Para ampliar esta práctica, deben existir normas similares a escala europea que aborden los diferentes tipos de odio, como el antisemitismo y la islamofobia.

Necesitamos más educación sobre los derechos humanos en el ámbito de la medicina: hay demasiados profesionales de la salud que se niegan a cuidar de los pacientes LGBT + y violan los derechos de las mujeres en el período posnatal con malas prácticas como el «marido», un elemento adicional después del parto innecesario desde el punto de vista médico. Además, un número significativo de profesionales de la salud siguen rechazando el derecho al aborto o a los anticonceptivos. 

Debería ser posible obtener la ciudadanía de la UE tras cinco años de trabajo o estudio en la UE. En la actualidad, no existe tal garantía. Las personas que trabajan en varios Estados miembros corren el riesgo de retrasar el acceso a la ciudadanía de la UE a las que permanecen en un país, lo que es injusto.

Dado que muchos artistas luchan por un medio básico de supervivencia, la UE debería establecer un salario mínimo para quienes trabajan en profesiones relacionadas con el arte.

El arte es uno de los valores y patrimonios fundamentales de Europa y nos hace intrínsecamente europeos. De hecho, muchos de los símbolos queridos de Europa son obras de arte. Por lo tanto, el salario mínimo para todos los trabajos relacionados con el arte allanaría el camino para una nueva era de producciones artísticas y reconocería el arte como una valiosa contribución a la sociedad.

La Comisión Europea debería reformarse para convertirse en un poder ejecutivo político en lugar de una institución apolítica o tecnocrática. De este modo, podrá defender los intereses comunes de la Unión.

Las formas de reformar la Comisión incluirían:

• La composición de la Comisión debe ser decidida por una coalición formada por una mayoría de diputados al Parlamento Europeo.
• Debería reformarse el denominado «sistema de cabezas de lista». El presidente debe ser nombrado y elegido por mayoría por el Parlamento Europeo y aprobado por el Consejo.
• El Parlamento podrá emitir en cualquier momento un voto constructivo de censura contra el Presidente de la Comisión, un Comisario individual o toda la Comisión.
• El número de carteras de comisiones debe reducirse a un máximo de...» de los Estados miembros actuales, asegurándose de que cada región de la Unión Europea esté representada en la Comisión. Podrá establecerse un sistema de rotación.
• Cada Estado miembro nombra a dos candidatos, y el presidente selecciona a continuación de esta reserva. Finalmente, el Parlamento vota individualmente a estos candidatos.

Mientras existan varias instituciones responsables de determinados procedimientos, nos enfrentaremos a dificultades administrativas. Por ejemplo, el reembolso de los gastos médicos y la admisión de permisos de residencia son administrados en algunos países por varias instituciones diferentes. Estos procedimientos administrativos deben simplificarse y centralizarse.

En particular, los más desfavorecidos luchan especialmente en invierno: Una gran parte de las viviendas, especialmente en los Estados miembros situados en el sur de Europa, no están preparadas para resistir el clima más frío, y muchas personas carecen de los recursos financieros necesarios para calentar adecuadamente sus hogares y no reciben ninguna ayuda financiera del Gobierno. Por lo tanto, para que todos los ciudadanos puedan llevar una vida sana y apoyar el bienestar de la población, es importante que la Unión Europea, así como los gobiernos nacionales y regionales, tengan en cuenta los problemas que aparecen especialmente en invierno y ayuden a los afectados por ellos.

El control fronterizo compartido es extremadamente difícil. Por lo tanto, no es sorprendente que la agencia común de fronteras de la UE, Frontex, tenga un margen de mejora significativo. Se proponen varias ideas para mejorar su enfoque de la gestión de las fronteras:

• Un observador de la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA) debe estar presente en todas las actividades de Frontex, a fin de garantizar la protección de los derechos de los migrantes.
• Además, la FRA debe llevar a cabo evaluaciones de la calidad de la respuesta humanitaria de Frontex, que se incluirán en los informes sobre temas clave.
• Frontex debe estar sujeta a los mismos requisitos de transparencia que otras agencias de la UE.
• El Parlamento Europeo y el Consejo Europeo deben tener más funciones decisorias en las operaciones de Frontex.

El acuerdo de Dublín es fundamental para la política migratoria de la UE. Sin embargo, presenta varias deficiencias:

• Debe darse a los solicitantes de asilo, en la medida de lo posible, la elección del país al que estén destinados.
• Si las solicitudes de protección de los solicitantes de asilo no se han resuelto en el plazo para tramitar su caso, no deben ser retiradas de la UE: deben protegerse hasta que se defina su estado.
• La distribución de los titulares de asilo en toda la UE debería determinarse mediante una cuota basada en numerosos criterios (incluidos el PIB y la tasa de desempleo). Esto debería incluir un método para garantizar el cumplimiento por parte de los Estados miembros, permitiendo una mayor armonización.
• Las solicitudes de asilo deberían ser más accesibles en los países de origen y de tránsito.

No hay modelos femeninos para que las jóvenes busquen en los planes de estudios escolares. Estos modelos de referencia deben promoverse desde una edad temprana para que las niñas puedan sentirse inspiradas en su potencial. Las niñas también deben aprender sobre los posibles problemas específicos de género a los que pueden enfrentarse como mujer adulta.

El Parlamento Europeo debería centrarse más en promover la diversidad en nuestra sociedad. Necesitamos más educación y concienciación sobre cómo aceptar a personas de distintos orígenes y opiniones de nuestro propio país.

La UE debe seguir desarrollando su iniciativa sobre la tarjeta azul, utilizándola para atraer mentes brillantes a los ámbitos necesarios de la economía de fuera de Europa. Esto permite a la UE mantener abiertas sus fronteras y mantener la migración regular. En caso necesario, podría limitarse el número de visados al año.

Desde 2017, los titulares de pasaportes ucranianos pueden viajar sin visado al espacio Schengen, lo que excluye los viajes a Irlanda. Para viajar a Irlanda, que no forma parte del espacio Schengen, se requiere un visado. Sin embargo, los titulares de pasaportes irlandeses pueden viajar a Ucrania sin necesidad de obtener un visado. Por lo tanto, estos reglamentos deben revisarse para que los viajes entre ambos países sean equitativos y justos.

En las redes sociales, el anonimato hace que sea más fácil que nunca participar en prácticas nocivas como la incitación al odio y el trollo. Si los usuarios publican contenidos con su propio nombre, podrían ser más fácilmente responsables de sus acciones. Necesitamos orientaciones y legislación de la UE que permitan identificar más fácilmente a las personas.

La identificación electrónica parece ser un aspecto esencial de la vida cotidiana en el mundo digital. Así pues, la UE debe desarrollar un documento de identidad digital seguro y fiable para todos los ciudadanos europeos.

Dado que muchos ciudadanos de la UE siguen sufriendo una burocracia excesiva, Europa debe crear una base de datos en línea de la UE en la que las personas puedan actualizar y modificar sus documentos personales en todo el territorio europeo.  

Los gigantes de internet, como las empresas de redes sociales, deben divulgar sus algoritmos por razones de transparencia. Es importante que las personas puedan decidir el tipo de contenido y de información que reciben. De este modo, en lugar de la creciente agresividad que domina ahora en Internet, las personas también pueden ser más abiertas y tolerantes.

En la actualidad, cada vez más niños más jóvenes participan en actividades en línea y tienen acceso a plataformas, redes sociales y sitios web en línea. Sin embargo, numerosas plataformas en línea han sido objeto repetidamente de ataques informáticos, lo que demuestra que los peligros en línea para los niños y adolescentes, que no son tan conscientes como los adultos en relación con el entorno en línea, son muchos. Por lo tanto, es importante que los sitios web y las plataformas de redes sociales solo sean accesibles a las personas que hayan alcanzado una edad adecuada.

Esto puede lograrse si la UE crea cookies específicas para verificar la edad de quienes se inscriben en plataformas de internet y prohibirlo a los niños menores de 13 años, de conformidad con la legislación europea. 

Todos los Estados miembros de la UE deben garantizar el derecho a poner fin al embarazo.

La libre circulación es uno de los principios clave de la Unión Europea. Por lo tanto, debemos tomar medidas para garantizar que ni siquiera incidentes como las pandemias la socaven, como hicieron cuando hubo que cerrar las fronteras debido a la COVID-19.

Toda persona debe tener derecho a practicar su propia religión. La UE debería contribuir a salvaguardar este derecho para todos los ciudadanos.

Si bien es importante supervisar y evaluar los proyectos que reciben financiación de la UE, hacer demasiado difícil que las iniciativas y las organizaciones soliciten y reciban dicha financiación impedirá el éxito de las más pequeñas.

Debe reforzarse la protecciónjurídica contra la discriminación y la violencia de género. Cualquier incidente de discriminación debe notificarse a las autoridades y, por ejemplo, los empleadores deben rendir cuentas de la discriminación en los salarios, la asignación de responsabilidades o las decisiones de contratación. En el Derecho penal, las sanciones por violencia de género, incluida la violencia sexual, también deben ser más severas.

La integración en un nuevo país, navegando con una nueva burocracia en una nueva lengua, es extremadamente difícil. Los migrantes necesitan mucha ayuda para encontrar el camino correcto. Para ayudar, la UE podría apoyar la creación de una aplicación que contenga asesoramiento exhaustivo y respuestas a preguntas clave relativas a la integración en cada Estado miembro. La aplicación abordaría:

• Derechos y obligaciones de los migrantes
• Acceso a oportunidades de empleo.
• Información sobre oportunidades educativas.
• Información sobre las comunidades locales.
• Asesoramiento sobre aspectos prácticos clave, como el alquiler, la inscripción, el seguro, etc.

Esto podría complementarse con un chat con conocimiento de la legislación y los sistemas nacionales o locales.

Es necesario mejorar varios aspectos de las actuales políticas fiscales y del IVA. Es necesario aumentar la transparencia en el gasto de la financiación de la UE y los mecanismos de control a escala de la UE sobre el nivel nacional en la ejecución de los objetivos de los Tratados. Esto podría incluir la introducción de mecanismos que permitan a las instituciones de la UE controlar en cierta medida los sistemas nacionales. En este sentido, la UE debería estar facultada para garantizar unas prácticas institucionales correctas en los Estados miembros.